
El 18 de marzo, el Grupo de Trabajo (GT) sobre el Desarrollo del Sistema de Lisboa comenzó su sexta sesión en Ginebra. La primera sesión de esta serie se inició en 2018. Una mirada retrospectiva a la historia de estas sesiones muestra que ha habido cuatro series diferentes de reuniones del GT de Lisboa.
La primera serie, en 2000-2001, condujo a la modificación del Reglamento de aplicación del Arreglo de Lisboa. La segunda serie, entre 2009 y 2014, preparó la revisión del Arreglo de Lisboa, adoptada en la Conferencia Diplomática de 2015 en forma de Acta de Ginebra. A continuación, un GT trabajó, en 2016 y 2017, en el Reglamento Común de Aplicación del Arreglo de Lisboa y del Acta de Ginebra. Por último, desde 2018, el GT sobre el desarrollo del Sistema de Lisboa se ha reunido cinco veces antes de la presente sesión.
En este contexto, oriGIn realizó una entrevista a Erik Thévenod-Mottet, que ha sido nombrado Presidente del GT en 2022 y 2023, y que se propone que presida también el GT en 2025 y 2026.
El objetivo del GT de Lisboa
El objetivo del primer GT, en 2002-2001, era desempolvar las normas de aplicación para resolver ciertos problemas que habían surgido con el tiempo en la administración del sistema, explica Erik. También se pretendía modernizar el sistema, que empezaba a atraer a nuevos miembros. De hecho, tras décadas de relativo estancamiento, diez nuevas partes contratantes se unieron al sistema entre 2000 y 2015. En estos años, el sistema de Lisboa ha experimentado así una nueva tendencia de desarrollo que, combinada con las difíciles negociaciones sobre las IGs en la OMC y el creciente interés por las IGs por parte de muchos países en desarrollo, ha abierto un nuevo capítulo para la protección internacional de las IGs.
Por este motivo, la Asamblea General de la OMPI decidió en 2008 emprender una revisión completa del Arreglo de Lisboa, con el fin de actualizarlo y permitir que todos los países se adhirieran al sistema. Se trató de una empresa de gran envergadura, que culminó en la Conferencia Diplomática de 2015. Tras la adopción del Acta de Ginebra en 2015, se hizo necesario fusionar los reglamentos de aplicación del Arreglo de Lisboa y del Acta de Ginebra, con el fin de racionalizar la administración del sistema.
Desde 2018, el GT de Desarrollo del Sistema se ha reunido en cinco ocasiones. Este GT está trabajando en las modificaciones del Reglamento, a la luz de la experiencia de la implementación del Acta de Ginebra, que entró en vigor en 2020. En este sentido, la sexta sesión se centrará en facilitar la administración del sistema tanto para el Registro de la OMPI como para los miembros en lo que respecta a las tasas, adaptar las definiciones de denegación y concesión de protección para mayor claridad, y mejorar la tramitación de las modificaciones de los registros internacionales.
Como lanzar un trasatlántico
Esta sexta reunión del grupo de trabajo tiene lugar en un momento crucial del desarrollo del Sistema de Lisboa, afirma Erik. Se ha producido un aumento significativo del número de transacciones y la llegada constante de nuevos miembros. Están surgiendo problemas en la puesta en marcha del sistema, precisamente porque está empezando a funcionar a pleno rendimiento. Es como lanzar un transatlántico: en cuanto sale del astillero y se lanza al agua, hay que hacer pequeñas reparaciones y mejoras, lo cual es normal. Y ahora que la maquinaria está en marcha y el transatlántico ha alcanzado la velocidad de crucero en alta mar, nos damos cuenta de que son necesarios más ajustes y, sobre todo, de que hay que formar a la tripulación en navegación; eso también es normal.
Por eso, además de las enmiendas propuestas al Reglamento de aplicación, la reunión del GT se centrará en las actividades de formación (incluido eLisbon) y el intercambio de información entre los miembros. A partir de estos intercambios, podrán tratarse otros temas en una reunión posterior del GT.
Hacia la comprensión y la convergencia
Todos los miembros del Sistema de Lisboa desean mejorar y simplificar la administración del sistema, en su propio interés como autoridades competentes, pero también en interés de los beneficiarios de sus IGs. Sin embargo, pueden tener puntos de vista divergentes sobre cómo alcanzar este objetivo. El objetivo de los debates que tienen lugar en el seno del GT es conciliar los puntos de vista a través del diálogo, como menciona Erik. Pero, sobre todo, son la información más detallada, las aclaraciones y, a veces, los ajustes los que permiten llegar a un consenso.
El Sistema de Lisboa, en virtud del Acta de Ginebra, sólo lleva en vigor cinco años. Por lo tanto, aún está en sus inicios, especialmente si tenemos en cuenta sus características específicas como sistema global de la OMPI: por una parte, prescribe un estándar de protección; por otra, incluye una serie de opciones que hacen que su gestión sea aún más compleja. Si además tenemos en cuenta las características específicas de las IG, ¡son muchos los retos a los que hay que hacer frente! En este contexto, la reunión del Grupo de Trabajo constituye un punto culminante en el actual proceso de apoyo e intercambio entre la Secretaría de la OMPI, las autoridades competentes de las partes contratantes y los beneficiarios de las IG.
Mi objetivo es garantizar un proceso inclusivo
La información y la comprensión son esenciales para tomar buenas decisiones. Como Presidente, mi objetivo es facilitar los intercambios, afirma Erik. Esto requiere a veces diferentes formatos: además de una sesión de formación para los miembros y una mesa redonda, que esta vez se organizan al mismo tiempo que la reunión del GT stricto sensu, los intercambios bilaterales y las reuniones paralelas son también elementos del diálogo. El Presidente debe estar en el centro de todos estos intercambios y servir de enlace con la Secretaría de la OMPI. En última instancia, el proceso debe ser integrador.
Para ésta y futuras reuniones del GT, menciona Erik, espero que se tomen decisiones para racionalizar y mejorar la administración del sistema de Lisboa, que aumente la comprensión general del sistema y sus retos actuales entre los miembros y no miembros por igual, y que algunas cuestiones complejas se aclaren o se pongan sobre la mesa para una futura reunión del GT.